lunes, 11 de enero de 2016

Rechazan la petición para que declaren Felipe VI y su padre

PALMA DE MALLORCA.- El tribunal que juzga el 'caso Nóos' ha rechazado la citación como testigos en este procedimiento tanto del actual Jefe del Estado, Felipe VI como de su padre el Rey emérito, cuya presencia ya había sido planteada meses atrás por la defensa del exsocio de Iñaki Urdangarín, Diego Torres, y rechazada por la Sala.

La presidenta del tribunal, Samantha Romero, ha explicado tras un receso de hora y media durante el cual la Sala ha deliberado sobre este asunto que mantiene la decisión denegatoria que ya argumentó en un auto del pasado mes de octubre, y ha añadido que no hay circunstancia novedosa que justifique una reconsideración al respecto.
El abogado de Torres, Manuel González Peeters, ha expresado su protesta por esta decisión, que él había justificado en relación con determinadas facturas del Instituto Nóos que, según ha recordado la presidenta de la Sala, ni siquiera son objeto de acusación es este procedimiento.
En representación de todas las acusaciones, el fiscal Anticorrupción Pedro Horrach mostró su oposición a las citaciones instadas por el abogado de Torres aduciendo que "ya es suficiente" el interés mediático que tiene ese proceso para que se quiera convertir en una "ceremonia para distracción del vecindario".
A juicio del fiscal, las citaciones como testigos de zu Sayn-Wittgenstein o de Irene de Grecia no tienen otra finalidad que "convertir este juicio en un reality show" más que probar los hechos de los que se acusa a los procesados.
El abogado de Torres, sin embargo, ha replicado durante su turno de palabra que no hay ningún testigo de los que ha propuesto que no guarde relación con los hechos y cuya presencia no esté fundamentada en relación con determinados documentos que, paradójicamente, sí se utilizarán como prueba en este juicio.
El pasado mes de octubre, la Audiencia Provincial de Baleares ya dictó un auto en el que negaba que se hubiera producido "vulneración de normas esenciales" del derecho por haber sido denegadas las citaciones del Rey Felipe VI, la Infanta Elena, Pilar de Borbón o la noble alemana zu Sayn-Wittgenstein.
En su comparecencia de este lunes, el abogado de Torres reincidió en la necesidad de que todas ellas fueran citadas como testigos en el juicio aunque no citó por su nombre ni al actual jefe del Estado ni a su padre, el Rey emérito, a los que se refirió como el "suegro" y el "cuñado" de Iñaki Urdangarín.
 En su resolución del pasado 6 de octubre, el tribunal de la Sección Primera de la Audiencia Provincial de Baleares inadmitió "por imperativo legal " la declaración de Rey Felipe VI aduciendo el artículo 411 de la Ley de Enjuiciamiento Criminal (LeCrim), que dispone expresamente que el Rey está dispensado de la obligación de prestar declaración.
La defensa de Torres había propuesto un total de 696 testigos, entre ellos Felipe VI, con el objetivo de acreditar cómo la Casa Real estaba al corriente de las actividades desplegadas por el Instituto Nóos.
Los abogados de cuatro de los cargos públicos valencianos que están acusados han pedido al tribunal que admita como prueba un informe sobre el retorno en términos de reputación que supuso para la Ciudad de las Artes y las Ciencias (CACSA) de Valencia la organización por parte del Instituto Nóos de las cumbres Valencia Summit en 2004, 2005 y 2006.
Antonio Reyes, defensor del exdirector del Instituto Valenciano de Finanzas Jorge Vela, ha destacado que el informe establece una correspondencia exacta entre el coste y el beneficio obtenido. Vicente Grima, defensor del exsecretario de Turismo de la Comunidad Valenciana Luis Lobón, han incidido en que contabiliza la presencia en prensa que le reportaron a CACSA los eventos.
Luisa Gurillo, abogada de la que fue la responsable jurídica de CACSA, Elisa Maldonado, ha dicho que el informe indica que lo que esperaba obtener CACSA al suscribir los convenios del Valencia Summit lo obtuvo en repercusión mediática.
También la defensora del exdirector de CACSA, José Manuel Aguilar, la abogada Josefa Rosselló, ha pedido que se admita dicho informe pericial por ser "útil y pertinente" para acreditar el interés público de los convenios y que los acuerdos se suscribieron por CACSA en el marco de la normalidad y no porque dicha entidad careciera de mecanismos de control o de limitación económica como alegan las acusaciones.
La letrada ha señalado que CACSA suscribió otros convenios de colaboración para patrocinar eventos, sin que supusieran vulneración de la legalidad, que indican que aquellos acuerdos no obedecían exclusivamente a que Iñaki Urdangarin era yerno del Rey.

Carme Forcadell informa por 'mail' al Rey de la investidura de Puigdemont como president de la Generalitat catalana

BARCELONA.- La presidenta del Parlament, Carme Forcadell, ha comunicado oficialmente al Rey este lunes la investidura de Carles Puigdemont como presidente de la Generalitat de Cataluña a través de un correo electrónico.

Según un comunicado del Parlament, la Cámara solicitó audiencia a Felipe VI el mismo día de la investidura para que Forcadell pudiera informarle en persona este lunes, pero "la comunicación se ha hecho por escrito a petición de la Casa Real".
La comunicación al monarca es un paso previo antes de la toma de posesión del nuevo presidente de la Generalitat, pero este mismo lunes por la mañana Forcadell ha dicho en una entrevista que si no asistía personalmente a La Zarzuela, podría remitirse la información al Rey por carta, lo que no afectaría el calendario.

Mutismo en La Zarzuela ante el comienzo del juicio en Palma contra Urdangarín y la infanta Cristina

MADRID.- La infanta Cristina, hermana menor de Felipe VI, se sienta este lunes en el banquillo en el juicio por el caso Nóos, en el que también está acusado su marido, Iñaki Urdangarin, sin que la Casa del Rey tenga previsto pronunciarse en ningún sentido sobre el arranque de la vista oral. 

Don Felipe no tiene ningún acto oficial programado para el lunes; a la espera de que el miércoles se constituyan las Cortes y abra su ronda de consultas con las fuerzas políticas para proponer un candidato a la Presidencia, su agenda de la semana no tiene actividades públicas.
Desde el Palacio de Zarzuela el mutismo es absoluto en torno al procedimiento judicial que ha llevado a la hermana del Rey hasta el banquillo, acusada de dos delitos fiscales relacionados con la presunta trama corrupta en torno al instituto Nóos, promovido por su esposo. Una decisión del tribunal determinará si, en aplicación de la llamada doctrina Botín marcada en 2007 por el Tribunal Supremo, queda o no exonerada del juicio.
Sea como sea, la Casa del Rey seguirá guardando la distancia y prudencia que ha caracterizado a la institución desde que doña Cristina quedó fuera de la Familia Real cuando fue proclamado su hermano, en junio de 2014, al pasar de hija a hermana de Rey.
La infanta Cristina ya había quedado mucho antes alejada de la actividad oficial de la Familia Real, desde finales de 2011. Una vez que abdicó su padre, el Rey Juan Carlos, y su hermano asumió la Corona, la nueva conformación de los miembros de la Familia Real, de la que quedaron excluidas las hermanas del Monarca, ratificó su completo apartamiento de los actos institucionales.
Especialmente significativo fue el gesto de don Felipe, el 11 de junio del año pasado, cuando revocó a doña Cristina el título de duquesa de Palma de Mallorca del que disfrutaba desde 1997 por decisión del Rey Juan Carlos. Ya había pasado medio año desde que el juez instructor del caso Nóos, José Castro, decidió llevarla a juicio como presunta cooperadora necesaria en dos delitos fiscales.
Fueron meses de especulaciones sobre si ella debía renunciar al ducado o a sus derechos dinásticos; finalmente, su hermano le retiró el título, pero sigue manteniendo esos derechos, de los que no se le puede privar salvo que decida renunciar “motu propio”.
En los momentos clave del procedimiento, como la decisión del juez instructor de llevarla a juicio, adoptada ya bajo el reinado de Felipe VI, Zarzuela se limitó a expresar su respeto absoluto a la independencia del poder judicial.
Durante el reinado del actual Monarca han sido muy pocas las ocasiones en que doña Cristina ha coincidido con su hermano en actos públicos. Ni ella ni su marido, que residen en Ginebra (Suiza) estuvieron presentes en el Congreso en la ceremonia de proclamación de Felipe VI, ni tampoco en la abdicación de su padre, celebrada la víspera en el Palacio Real.
En su discurso de proclamación, el Rey subrayó que la Corona debe “velar por la dignidad de la institución, preservar su prestigio y observar una conducta íntegra, honesta y transparente”. “Hoy más que nunca, los ciudadanos demandan con toda razón que los principios morales y éticos inspiren -y la ejemplaridad presida- nuestra vida pública”, añadió.
La última vez que estuvieron juntos en un acto público fue en la basílica del Real Monasterio de San Lorenzo de El Escorial, en la misa corpore insepulto oficiada por el infante Carlos de Borbón-Dos Sicilias, primo del Rey Juan Carlos, el pasado 8 de octubre.
Además de don Felipe y doña Letizia, los Reyes Juan Carlos y Sofía y la infanta Elena, a la ceremonia también acudió doña Cristina, en la primera ocasión en que coincidía con los Reyes en cinco meses.
También habían estado juntos el 8 de junio de 2015, en la iglesia de San Jerónimo del Real, en el funeral ortodoxo por Kardam de Bulgaria, hijo del exprimer ministro y depuesto rey Simeón de Bulgaria y de Margarita Gómez Acebo, a la que igualmente asistieron los demás miembros de la familia del jefe del Estado -sus padres y sus hermanas, así como la Reina Letizia-.
Había pasado un año desde que doña Cristina coincidió en público con don Felipe y doña Letizia en el acto religioso celebrado en Atenas el 6 de marzo de 2014, en el cementerio real del Palacio de Tatoi, para rendir homenaje al rey Pablo I de Grecia, en el 50º aniversario de su muerte.