sábado, 31 de enero de 2015

Felipe VI celebró en Addis Abbeba su primer cumpleaños como Rey

MADRID.- El Rey Felipe VI llegó ayer Addis Abbeba, la capital de Etiopía donde se celebra la 24ª cumbre ordinaria de la Unión Africana (UA), un foro al que ha sido invitado el jefe del Estado español, que tuvo la oportunidad de mantener diversos encuentros bilaterales con líderes africanos y de esta organización.

En el día de su 47º cumpleaños, el primero que celebra como Rey de España, el monarca llegó a primera hora de la mañana al aeropuerto de Adis Abeba en un avión de la Fuerza Aérea Española, acompañado del ministro español de Industria, Energía y Turismo, José Manuel Soria.
A pie de la escalerilla le esperaban el ministro etíope de Asuntos Exteriores, Tedros Adhanom, y el embajador de España, Miguel Fernández-Palacios.
Tras ser recibido con honores en las pistas del aeródromo, Felipe VI se desplazó a la embajada española para incorporarse después, en la sede de la UA, a la sesión de apertura de su asamblea, a la que está previsto que asista el secretario general de la ONU, Ban Ki-moon, con quien después celebrará su primera reunión bilateral.
El presidente de Mauritania, Mohamed uld Abdel Aziz, ejerce la presidencia de turno de la Unión Africana, una organización panafricana que agrupa a 54 socios (todos los países del continente salvo Marruecos) y que adoptará decisiones clave en materia de paz y seguridad, asuntos sociales y economía.
El primer ministro de Etiopía, Hailemariam Desalegn, habría invitado al Rey a pronunciar un discurso ante los líderes africanos en la cena conmemorativa de este foro internacional, un gesto muy valorado por la Casa Real española por cuanto supone de reconocimiento a la figura del jefe del Estado.
Felipe VI permaneció poco más de 15 horas en Adis Abeba, pero en este tiempo celebró varias entrevistas, asistió a la sesión de apertura de la asamblea, recibió en la embajada española a unos 150 representantes de la colectividad española y conversó con Desalegn antes de su discurso durante la cena oficial, tras la cual regresó a España.
Este viaje refleja el decidido compromiso de España con el continente africano, que el propio monarca confirmó recientemente con una declaración en la que aseguró: "África, para nosotros, significa sobre todo oportunidades compartidas".
También fijó como pilares fundamentales de la apuesta española por el continente hacer frente a los "desafíos" de la paz y seguridad, contribuir al avance de la democracia y los derechos humanos y promover una asociación económica que contribuya a la prosperidad de los ciudadanos africanos.

Una tarta etíope para el cumpleaños de Felipe VI

ADISS ABBEBA.- El rey Felipe VI cumplió 47 años a 5.381 kilómetros de casa, que son los que separan Madrid de Adiss Abbeba, la capital de Etiopía a la que voló en un viaje relámpago para asistir a la cumbre de la Unión Africana y cumplir con una ajetreada agenda en la que también hubo tarta y "Cumpleaños feliz".

El primer ministro etíope, Hailemariam Desalegn, que mantiene unas excelentes relaciones con España, fue el artífice de la celebración del cumpleaños, ante los líderes africanos a los que había invitado a una cena en el lujoso hotel Sheraton, y con el monarca un tanto avergonzado.
Primero le presentó a los comensales, entre ellos el secretario general de la ONU, Ban Ki-moon, sin ahorrar elogios sobre la figura del nuevo monarca español, y aprovechó para recordar que hoy era su aniversario, lo que desató cariñosos aplausos.
Con cierta timidez, el rey agradeció "la sorpresa", poniéndose de pie y llevándose una mano al corazón.
Lo que no sabía el jefe del Estado español es que la verdadera sorpresa iba a llegar más tarde al terminar su alocución, cuando se disponía a ocupar de nuevo su asiento y una voz le pedía que esperara.
Unos camareros le trajeron una gran tarta rectangular, de crema y con fresas, sin velas, con la leyenda "Feliz Cumpleaños" escrita en español, y le acercaron un cuchillo para que pudiera cortarla.
El cuarteto de cuerda que había amenizado la larga espera que precedió al arranque de la cena comenzó entonces a interpretar un "Happy Birthday" que muchos corearon mientras el rey cortaba el pastel y de nuevo recibía aplausos de los invitados.
La tarta etíope no era la única destinada hoy en Adiss Abbeba para Felipe VI: antes de la celebración había compartido un encuentro en la embajada con un centenar de españoles residentes en Etiopía, y también había una tarta preparada para él, española en este caso.
Pero la recepción comenzó con un minuto de silencio en memoria del militar español muerto en Líbano el miércoles pasado, y como no se consideró apropiado que una fiesta siguiera a un momento de recogimiento semejante, al final la tarta se quedó en la cocina.
El colofón de la tarta de cumpleaños de Hailemariam Desalegn cerró una jornada de aniversario que el monarca español vivió prácticamente sin un momento de respiro.
Porque durante las quince horas que pasó en Addis Abbeba no sólo siguió la apertura de la cumbre de la UA, también celebró varios encuentros bilaterales de gran importancia, como los mantenidos con Ban Ki-moon o con el presidente egipcio, Abdelfatah al Sisi.
Ni comer tranquilamente pudo, porque aunque tenía previsto hacerlo en la embajada, al final se comió un bocadillo a toda prisa, en la sede de la Unión Africana, mientras esperaba la siguiente reunión.
El rey viajó de regreso anoche a Madrid, donde hoy sábado podrá celebrar sus 47 años más un día con la reina Letizia y sus hijas, la princesa Leonor y la infanta Sofía.