domingo, 7 de junio de 2015

Con ésto, ¿tampoco va a pasar nada? / Ramón Cotarelo *

Que el Rey pueda ser un imbécil o un criminal capaz de homenajear en España a los compañeros de quienes su protector Franco asesinó a mansalva y cuyos huesos yacen aún en fosas comunes en todo el país está dentro de la naturaleza de las cosas. Hasta es probable.
Que al gobierno de mangantes neofranquistas esto no le produzca reparo alguno y hasta le parezca bien, también es muy probable dado que está compuesto de nacionacatólicos y fascistas más o menos nostálgicos, a quienes la coherencia ética nunca ha parecido asunto de interés porque desconocen qué sea la ética, la conciencia u otras zarandajas. Si hay que disimular y hacer como que la justicia y los derechos humanos nos importan, se disimula y se hace. Al fin y al cabo, lo suyo es robar.
Que la oposición -en gran medida heredera de los héroes de la Nueve en París y de los asesinados en el genocidio franquista- todavía no haya dicho nada, ni protestado siquiera, demuestra su grado de abyección moral, habiendo cambiado un lugarcejo al sol de las elecciones por su responsabilidad por el restablecimiento de la justicia en nuestro país. Demuestra que no solamente no tiene valor para presentar una moción de censura, sino que también carece de él para respetar sus propios ideales y la memoria de quienes murieron por ellos. O sea, que es tan escoria y bazofia como la corona, el gobierno y su partido.
Que los medios no den la noticia, no digo ya completa, como aquí, sino ni siquiera manipulada, censurada, por temor a que la gente ate cabos, demuestra que, si los políticos de la oposición son miserables y cobardes, los periodistas lo son por partida doble porque su deber es precisamente este: informar de algo que tiene una indudable trascendencia.
El Rey homenajea en París a los republicanos españoles, compañeros de los cientos de miles que los fascistas también españoles asesinaron y enterraron en fosas comunes y que el gobierno de este Rey y él mismo siguen negándose a desenterrar y hacerles justicia.
Los viejos soldados nunca mueren

Esta línea de la antigua  balada antimilitarista, reconvertida luego en timbre de honor por el general MacArhur en la guerra de Corea, se aplica a la inenarrable ceremonia de esta semana en la que Felipe VI homenajeó en París a los combatientes españoles republicanos de la novena compañía de la división Leclerc y haciéndolo, si no yerro, bajo los colores de la bandera de quienes los expulsaron de su país. Aquí solo una reflexión complementaria, para ver más de cerca esta vergüenza de la Gran Nación.

La Europa de hoy es el resultado de la derrota del fascismo. España lo es de su victoria. Allí ganaron quienes aquí perdieron. No compartimos memorias. No compartimos nada. En Europa abundan los recuerdos, monumentos, homenajes a los antifascistas. No hay ninguno que honre la memoria de los fascistas. Aquí es al revés: apenas dos o tres placas y recuerdos a los antifascistas, generalmente por iniciativa municipal, y una plétora de monumentos, calles, plazas, arcos, fuentes, paseos y hasta pueblos enteros dedicados a honrar la memoria de los fascistas. La historia la escriben los vencedores y, por eso, el arco de La Moncloa, a la entrada de Madrid,  sigue llamándose Arco de la victoria.
Felipe VI hiló un discurso vergonzoso. Por el contenido y por la circunstancia. Citó como si fuera motivo de orgullo, la presencia en Francia de artistas e intelectuales españoles, entre los que mencionó a Picasso, Dalí y Machado. Pero no dijo nada de las razones de la marcha de muchos de ellos.  Y eran poderosas. Le ofrezco un par de ejemplos, entre otros posibles, por si las desconoce. Julián Zugazagoitia y Lluís Companys eran dos españoles que también se fueron a Francia en aquellos años. Los ocupantes alemanes los capturaron, se les entregaron a Franco y Franco los hizo fusilar. ¿Entiende S.M. por qué se iban los españoles, incluidos los combatientes de la Nueve?
Pero hay más. Hay la circunstancia. Casi nadie subraya el hecho verdaderamente aleccionador de que el discurso de Felipe VI se hiciera en presencia de la alcaldesa de París, Anne Hidalgo, nieta de exiliado político del franquismo e hija de emigrante económico de ese mismo franquismo. El franquismo que nombró Rey a su padre.
No, los viejos soldados nunca mueren. Solo se difuminan. 
(*) Catedrático emérito de Ciencia Política en la UNED

sábado, 6 de junio de 2015

El Rey Felipe VI preside como tal su primer desfile militar en el 'Día de las Fuerzas Armadas'


MADRID.- Los Reyes don Felipe y doña Letizia han presidido hoy, en Madrid, por vez primera, el Día de las Fuerzas Armadas. Un acto sobrio (ha costado 40.000 euros, un 90% menos) y sin la parafernalia neofranquista, de apenas media hora de duración y con escasa presencia política. 

Junto a los monarcas, sólo los ministros de Defensa e Interior, Pedro Morenés y Jorge Fernández Díaz. También la alcaldesa en funciones de Madrid, Ana Botella, la delegada del Gobierno, Concepción Dancausa y, el todavía presidente de la Asamblea madrileña, José Ignacio Echevarría, aparte de otros altos cargos del Ministerio de Defensa y de la Casa del Rey.
A su llegada, la Guardia Real, mientras sonaba el Himno Nacional, ha rendido honores a Felipe VI vestido con uniforme de capitán general del Ejército de Tierra, quien ha saludado a las autoridades presentes, ha pasado revista a las tropas, se ha procedido al homenaje a los Caídos mientras sonaba 'La muerte no es el final' luego el toque de oración seguido de una descarga de fusilería y, a continuación, ha dado comienzo a un desfile de 600 elementos de la propia Guardia Real, el Ejército de Tierra, el Ejército del Aire, la Armada y la Guardia Civil, todo entre el Paseo del Prado y la Plaza de Cibeles.
El rey Felipe VI pasó revista a las tropas nada más llegar a la Plaza de la Lealtad, donde cientos de personas han arropado a los Reyes y a las Fuerzas Armadas en esta jornada castrense. El rey depositó primero una doble corona de laurel, en homenaje de recuerdo a los caídos por España en todas las guerras, a los piés del monumento a los héroes en los jardines de la plaza. 
Posteriormente los monarcas presidieron una breve parada militar en la que participaron unidades de todos los ejércitos y de la Guardia Civil. La Patrulla Águila irrumpió en el cielo de Madrid pintando con los colores de la bandera española mientras los gritos por España, por los Reyes y, sobre todo, por el Himno Nacional, se multiplicaron durante la breve y austera ceremonia. 
Una vez que desfiló el último soldado, el Rey se apresuró a abandonar la discreta tribuna, despedirse de las autoridades y abandonar la zona, no sin antes saludar de nuevo a los cientos de ciudadanos que se habían acercado a participar de la parada militar.
Posteriormente los Reyes han ofrecido un 'lunch' en el Palacio Real a unos 300 invitados, la mayoría de ellos numerosos jefes y oficiales de los tres ejércitos y de la Guardia Civil. 
Los actos conmemorativos del Día de las Fuerzas Armadas de este sábado han comenzado a las 10.30 horas con el izado solemne de la bandera de 290 m2 en la Plaza de Colón, de Madrid, que ha sido presidido por el Jemad, quien ha estado acompañado por el jefe del Estado Mayor del Ejército de Tierra (jeme), general Jaime Domínguez-Buj; el jefe del Estado Mayor del Ejército del Aire (jema), Francisco Javier García Arnaiz; el jefe del Estado Mayor de la Armada (ajema), almirante general Jaime Muñoz-Delgado, y el director general de la Guardia Civil, Arsenio Fernández de Mesa.

En el acto, que ha sido sencillo, ha estado presente una compañía mixta de los Ejércitos, la Armada y la Guardia Civil, a los que ha pasado revista la autoridad competente antes del izado de la bandera y la llegada posterior de los Reyes a la plaza de la Lealtad.

Gritos a favor de la Corona

Los Reyes han sido acogidos con aplausos y gritos de "viva España" y "viva la Corona" de cientos de personas que han presenciado la celebración.
Aplausos y gritos de "vivas" a la monarquía y las Fuerzas Armadas se han escuchado durante el acto, especialmente a la llegada de los Reyes a la plaza de la Lealtad, pasadas las 12:30 horas, y a su partida al finalizar el acto.
Tras el acto, que ha durado unos 25 minutos, las autoridades se han dirigido a la recepción oficial que han ofrecido los Reyes en el Palacio Real.
Este 6 de junio ha sido el primer Día de las Fuerzas Armadas para Don Felipe, pero no el primer acto militar que preside como rey de España. Después de su proclamación, el monarca presidió el desfile con motivo del Día de la Hispanidad el 12 de octubre y el 6 de enero fue el anfitrión en el Palacio Real durante la Pascua Militar. Por tanto, este ha sido el último acto militar que preside antes de cumplir su primer año como jefe del Estado.
La celebración del Día de las Fuerzas Armadas se remonta a 1978, cuando se estableció la conmemoración anual de una fiesta de carácter nacional que homenajeara a los Ejércitos y fomentara el conocimiento y la integración entre los mismos y la sociedad española.

El rey Felipe VI, flanqueado por la Reina Letizia, ha presidido este sábado por primera vez el Día de las Fuerzas Armadas, en la ceremonia celebrada en el centro de Madrid y que en esta edición fue retransmitida en directo por Televisión Española. En el desfile, que ha concluido en la Plaza de la Lealtad, participarán unos 600 militares.
Los actos han costado unos 140.000 euros, cifra similar a la del año pasado. Además del desfile en Madrid habrá 274 eventos repartidos por toda la geografía española.
El ministro de Defensa, Pedro Morenés, ha afirmado que las Fuerzas Armadas "forman parte fundamental de la sociedad española" y se sienten reconocidas por la misma. En declaraciones a Televisión Española momentos antes de que comenzara la parada militar, ha afirmado que el rey Felipe VI "ha asumido perfectamente su papel de mando supremo" de los tres ejércitos".
Además, ha dicho que, ya siendo príncipe de Asturias, "demostró un conocimiento profundo de esta institución y un cariño tremendo".


Leer más:  El Rey Felipe VI preside su primer desfile de las Fuerzas Armadas. Noticias de España  http://www.elconfidencial.com/espana/2015-06-06/fuerzas-armadas_872113/#lpu6vdQyDEdsII6m

El rey Felipe VI, flanqueado por la Reina Letizia, ha presidido este sábado por primera vez el Día de las Fuerzas Armadas, en la ceremonia celebrada en el centro de Madrid y que en esta edición fue retransmitida en directo por Televisión Española. En el desfile, que ha concluido en la Plaza de la Lealtad, participarán unos 600 militares.
Los actos han costado unos 140.000 euros, cifra similar a la del año pasado. Además del desfile en Madrid habrá 274 eventos repartidos por toda la geografía española.
El ministro de Defensa, Pedro Morenés, ha afirmado que las Fuerzas Armadas "forman parte fundamental de la sociedad española" y se sienten reconocidas por la misma. En declaraciones a Televisión Española momentos antes de que comenzara la parada militar, ha afirmado que el rey Felipe VI "ha asumido perfectamente su papel de mando supremo" de los tres ejércitos".
Además, ha dicho que, ya siendo príncipe de Asturias, "demostró un conocimiento profundo de esta institución y un cariño tremendo".


Leer más:  El Rey Felipe VI preside su primer desfile de las Fuerzas Armadas. Noticias de España  http://www.elconfidencial.com/espana/2015-06-06/fuerzas-armadas_872113/#lpu6vdQyDEdsII6m