Ahora el diario La Reppublica, de Italia, nos quieres
sorprender con que Juan Carlos y Sofía están tramitando su divorcio. Un
divorcio que de hecho, que no de Derecho, lleva vigente decenas de años.
Y ya desde tiempos de Felipe González, en los años ochenta, se llevaba
planeando. Aunque la verdad es que con la aparición de Corinna zu
Sayn-Wittgenstein en la vida de Juan Carlos, a comienzos del dos mil, la
decisión del entonces Rey de divorciarse y casarse con su amada tomó un
cariz que, al parecer, no cesa.
Porque
lo del divorcio real ha sido planteado por Juan Carlos a diferentes
líderes políticos. El último Rajoy, que lo vio contraproducente en la
actual situación política española, donde grupos de ultra izquierda
dudan de que el sistema monárquico sea el adecuado. Sobre todo por el
mal ejemplo del propio Juan Carlos, derrochando cientos de millones en
gastos para sus cacerías, en plena crisis económica y con medio país
pasándolo mal.
Pero
si Juan Carlos no se ha divorciado hace años de Sofía de Grecia no ha
sido por que los dirigentes políticos se lo desaconsejaran. Nada de eso.
El problema en este divorcio, como en casi todos, es el dinero. La
inmensa fortuna que acumula Juan Carlos en paraísos fiscales y que en
caso de divorcio Sofía le reclamaría la mitad de los mismos dado que
están casados, por la iglesia, en régimen de bienes gananciales.
Cuando
Juan Carlos contrajo matrimonio, en mayo de 1962, su fortuna personal
era inexistente. Al cabo de los años, a base de comisiones por la
importación de crudo y otras gestiones, ha logrado amasar una inmensa
fortuna oculta, que el New York Times la calcula, a grosso modo, en
miles de millones de euros. Ese es el problema. Corinna quiere disfrutar
de esa fortuna junto al anciano Juan Carlos, pero Sofía no está
dispuesta a que la parte que le corresponde se la apropie la última
amante de su marido.
Sofía
tiene muchos datos de dicha fortuna, en qué bancos, en qué paraísos
fiscales está depositada, y llegado el momento, si no hay un acuerdo
económico que respete su parte, filtrará a la prensa, ya lo ha hecho
varias veces, cifras, bancos y demás datos que pueden poner nervioso a
más de uno. Vamos, que le tiene pillado por donde más le duele. Por el
dinero.
(*) Periodista y editor de www.muyconfidencial.com
No hay comentarios:
Publicar un comentario