lunes, 4 de marzo de 2013

Se pone al descubierto en 13TV el nido de Corinna en El Pardo

MADRID.- Corinna residió en La Angorrilla, situada en el recinto de El Pardo, bastante cerca del complejo de La Zarzuela, según ha desvelado el programa Más claro, agua que dirige Isabel Durán en 13TV. La Angorrilla es uno de los antiguos cuarteles que integran El Pardo.

La residencia sirvió como vivienda de la "amiga entrañable" del Rey los últimos cuatro años, y allí residió junto a su hijo, gozando de escolta y protección oficial.

Esta situación fue confirmada por Alfredo Perdiguero, portavoz del Sindicato Independiente de la Policía Española, que señaló cómo se tenía constancia de que la conocida como Ingrid utilizó coches y servicios oficiales. 




Algunos medios de comunicación aseguraron que Corinna estuvo bajo seguridad de La Zarzuela y que durante sus estancias en España, en los últimos cuatro años, residía en “una vivienda con acceso restringido al público en el recinto de El Pardo, muy próxima al Palacio de la Zarzuela”. 
 
El pasado viernes el secretario general del SUP, José Manuel Sánchez Fornet, cargó contra los "hipócritas" que tras haber llegado a viajar con Corinna en desplazamientos oficiales negaban recordarla. En ese saco incluyó desde políticos a periodistas. 


Por otra parte, el secretario de comunicación del Sindicato Unificado de la Policía (SUP), José María Benito, ha asegurado que la princesa Corinna zu Sayn-Wittgenstein contó con escolta oficial durante el periodo de tiempo que vivió en España y que recibía protección por parte del Centro Nacional de Inteligencia (CNI).

El portavoz de este sindicato policial ha relatado que "el CNI le daba protección" y que "tenía escolta". Ha citado informaciones periodísticas para precisar que se trataba de guardias civiles adscritos a Defensa.

Según dice, "cuando se trata de proteger personalidades nunca se dice su nombre, sino que se usa una especie de palabra clave o nombre figurado" que en el caso de la princesa Corinna era "Ingrid".

Benito ha precisado que durante su estancia en España esta mujer vivió en Madrid. El portavoz del SUP no ha especificado dónde tenía fijada su residencia, aunque ha relatado que "los servicios de seguridad prestaron servicio en El Pardo en varias ocasiones".

El juez a Urdangarin: Vamos a llegar a la verdad con su colaboración o sin ella. Usted decide.

PALMA DE MALLORCA.- "La misión, como el deseo mío y creo que lo compartimos todos, es el de terminar esta instrucción lo antes posible. Pero no la vamos a terminar de cualquier forma". Así de contundente se mostró el juez instructor del caso Nóos, José Castro, nada más arrancar la segunda comparecencia como imputado del Duque de Palma, Iñaki Urdangarin, en el marco de la causa que investiga el presunto desvío de 5,8 millones de euros a través del Instituto Nóos.

   Al inicio de la declaración, a cuya transcripción, de un total de 83 páginas, el magistrado se mostró ante el encausado "perfectamente consciente del mal trago que está pasando, y créame que no obedece a capricho el convocarle por segunda vez", le puso de manifiesto el instructor antes de iniciar su extenso interrogatorio, que se prolongaría, a lo largo de la mañana del pasado 23 de febrero, durante más de cuatro horas.
   Dicho lo anterior, Castro aseveró que "vamos a llegar a lo que tenga que ser", para acto seguido explicar al Duque que o "podemos llegar a la verdad con su colaboración y será todo más fácil" aunque "no está obligado a prestarla", o "podemos llegar sin su colaboración y será más laborioso, pero es usted el que tiene que decidir, obviamente siguiendo el consejo de su letrado, que es el consejo que está usted llamado a seguir".
   Una introducción tras la cual el encausado procedió a anunciar que iba a declarar, si bien no en referencia, por cuestionar su autenticidad, a los correos electrónicos aportados por su exsocio Diego Torres, de los que se desprendería que la Casa Real estaba al tanto de las actividades desarrolladas por Nóos.
 Precisamente, el Duque comenzó su deposición leyendo un comunicado en el que afirmaba que "la Casa de Su Majestad el Rey no opinó, asesoró, autorizó o avaló las actividades que yo he desarrollado en el Instituto Nóos".

Urdangarin cobraba en Washington un sueldo de Telefónica de unos 350.000 euros, un 17% más que el Rey

PALMA DE MALLORCA.- Iñaki Urdangarin cobraba un sueldo de Telefónica mientras estuvo expatriado en Washington de unos 350.000 euros al año, lo que supone casi un 17 por ciento más de lo que gana el Rey como jefe del Estado.

   Así lo desveló el duque de Palma en su declaración ante el juez instructor del caso Nóos, José Castro, el pasado 23 de febrero. A preguntas de la Fiscalía, Urdangarin dice primero que no recuerda bien cuánto ganaba como directivo de Telefónica Internacional USA entre los años 2009 a 2012.
   Cuando el fiscal le indica que en los medios de comunicación se ha hablado de un salario de entre un millón y un millón y medio de euros, Urdangarin reacciona: "Ni muchísimo menos, yo debía estar cobrando en Washington 350.000 euros".
   Al margen de su sueldo, la compañía asumía, entre otros gastos, el coste de su vivienda en la capital estadounidense, como ocurre con "cualquier expatriado de Telefónica", añade el duque.
   Urdangarin niega haber cobrado de Telefónica tres millones y medio de euros por la rescisión de su contrato, como se llegó a publicar en los medios de comunicación. Según él, la compañía le "facilitó un dinero para poder volver a España".
 "No sé si fueron 200.000 euros", indica.
   Explica que en la actualidad él y su mujer tienen cuatro cuentas bancarias abiertas en España. Una a su nombre, otra a nombre de su esposa, una tercera conjunta, donde tienen los "gastos comunes de la casa", y una cuarta para la póliza de crédito de La Caixa, entidad que les concedió la hipoteca cuando compraron el palacete de Pedralbes.
   El importe global de las tres primeras cuentas "no llegará a 80.000 euros", afirma Urdangarin. De la hipoteca les queda por amortizar 3,6 millones de euros. El duque reconoce que como ahora no tiene ingresos le es "imposible" hacer frente a la póliza, por lo que lleva dos trimestres sin pagar.
   A pesar de los impagos, admite que "por el momento" no ha recibido "ningún requerimiento" del banco, a cuyo presidente, Isidro Fainé, conoce personalmente.
   Urdangarin afirma que las condiciones de su póliza fueron las que le ofreció la entidad. Entre ellas, figura la posibilidad de no tener que empezar a pagar durante los primeros cuatro años.

El fiscal a Revenga: "Sobre cosas espinosas sólo da evasivas"

PALMA DE MALLORCA.- El fiscal anticorrupción Pedro Horrach inició su interrogatorio al secretario de las Infantas, Carlos García Revenga, haciéndole ver que respondía con "evasivas" a las "cosas espinosas" para desvincularse de la actividad supuestamente ilegal desplegada por el Instituto Nóos.

   "Señor Revena, mire, cuando se le pregunta sobre cosas inocuas tiene usted una facilidad de palabra importante y da usted todo lujo de detalles: ya sé que es del Atlético de Madrid y que su abogado es del Real Madrid, pero cuando se le pregunta sobre cosas espinosas se queda usted callado y sólo da respuestas evasivas, totalmente evasivas".
   Fue el pasado 23 de febrero cuando García Revenga compareció como imputado en el marco del caso Nóos y, en un momento de su declaración el fiscal tomó la palabra para reprobar el hecho de que pese a ser "usted asesor y protector de las Infantas no conoce ningún detalle".
 "Intento responder lo que conozco, lo que no...", respondió en su defensa el encausado ante el representante del Ministerio Público.
   Después de que, en respuesta a las preguntas formuladas por el magistrado, García Revenga alegase que su cargo como tesorero en Nóos era simplemente "un puesto honorífico" y que "no me dijeron nada" respecto a lo que tenía que hacer, el fiscal quiso saber si después de que en 2006 el Duque de Palma, Iñaki Urdangarin, dejase de presidir el Instituto continuaron teniendo comunicación, el encausado aseveró que "no hemos dejado de tenerla ni hasta la actualidad; él sigue siendo el marido de una Infanta de España y ya está".
   "Lo que ocurre es que claro, hablamos de 2003 [cuando Urdangarin comenzó su vinculación con Nóos] y hablamos de una persona de 33 ó 34 años que, digamos, se acaba de incorporar. Entonces necesita, vamos a decirlo de alguna manera entre comillas, un mayor tutelaje que el que puede tener con posterioridad", explicó Revenga para justificar por qué fue menguando el contacto que mantenía con el Duque hasta 2006. "Efectivamente, ahora Don Iñaki ya hace mucho tiempo que no me consulta muchas cosas, o simplemente me comenta...".
   De hecho, al ser preguntado sobre si estuvo al tanto en el momento en que la Casa Real instó, presuntamente por mediación del asesor externo José Manuel Romero, a Urdangarin a que abandonase sus negocios relacionados con Nóos, el imputado fue tajante en su respuesta: "le puedo garantizar que no".

El Rey abandona la UCI

MADRID.- El Rey ha abandonado a las 11.00 horas de hoy la Unidad de Cuidados Intensivos (UCI) de la clínica La Milagrosa, de Madrid, y ha pasado a planta, después de presentar una evolución "muy positiva" durante la noche, según el último parte médico leído por el gerente del centro, Gaspar Palet.

   A Don Juan Carlos, que "ha podido descansar" la noche posterior a su operación de columna, se le ha practicado esta mañana "la primera cura postoperatoria". El siguiente parte médico se emitirá en 24 horas.
   Doña Sofía, que ha visitado de nuevo este lunes al Rey junto a las Infantas Elena y Cristina, ha respondido a las preguntas de los periodistas afirmando que el monarca se encuentra "muy bien". "Seguramente se levantará está noche", ha comentado.
   Minutos antes de las cinco, Doña Sofía y sus dos hijas han llegado al centro médico a bordo del mismo vehículo. Como ya ocurriera ayer, algunos curiosos que se agrupaban en las puertas de la clínica las han recibido con aplausos.
   El secretario personal de las Infantas, Carlos García Revenga, quien declaró como imputado el pasado 23 de febrero ante el juez instructor del caso Nóos, no se ha desplazado esta tarde junto a la Reina y sus hijas, como sí hizo ayer.
   La Infanta Cristina llegó ayer mismo a Madrid procedente de Barcelona y se dirigió junto a su madre y hermana a la clínica para seguir in situ la evolución de la operación del monarca. Poco después llegaban al centro los Príncipes de Asturias. Todos ellos abandonaron la clínica una vez concluida la operación y después de que pudieran hablar con el doctor que dirigió la intervención, el neurocirujano Manuel de la Torre.
   A diferencia de lo que ocurrió en la operación de cadera del monarca en noviembre pasado, la Infanta Cristina no ha estado acompañada de su marido, Iñaki Urdangarin, imputado en un presunto caso de corrupción. La presencia entonces del duque de Palma junto al resto de la Familia se interpretó como una especie de perdón al exjugador de balonmano por un amplio sector de la opinión pública.
   La Casa del Rey se vio obligada a eliminar al duque de la web de la institución para marcar de nuevo distancias con él. Urdangarin y su esposa permanecen apartados de la agencia oficial de la Familia Real desde el 12 de octubre de 2011, cuando participaron en su último acto.
   En estos días en la clínica Don Juan Carlos empezará a dar paseos cortos que se irán alargando según vaya recuperándose de la cirugía. Dentro de tres semanas aproximadamente, empezaría en su domicilio la "rehabilitación" muscular de la zona operada y posteriormente la recuperación "motora" y de las extremidades inferiores, para que vaya ganando "fuerza, tono" y que "pueda ir caminando cada vez con mayor naturalidad", explicó ayer el Dr. De la Torre.
   El doctor confía en que el Rey "podrá definitivamente olvidar" las muletas al término del proceso de recuperación de esta operación, siempre y cuando Don Juan Carlos no sufra alguna complicación de otra índole, que no guarde relación con las patologías de las que ha sido tratado ayer domingo.

El Duque dijo que la Infanta era vocal en Nóos pues había que cubrir "asientos"

PALMA DE MALLORCA.-  El Duque de Palma, Iñaki Urdangarin, justificó ante el juez instructor del caso Nóos que su mujer, la Infanta Cristina, era vocal en el Instituto que presidía porque hacían falta cinco personas para formalizar la Junta Directiva y "tuvimos, cómo decir, que cubrir esos asientos". No obstante, señaló que su esposa no hacía "absolutamente nada" sino que fue nombrada como persona "de máxima confianza y transparencia" para el cargo que iba a ostentar.

   Así lo puso de manifiesto durante su comparecencia del pasado 23 de febrero, cuya transcripción ha sido este lunes notificada a las partes personadas en la causa. "Era una persona de confianza mía en la Junta Directiva, simplemente eso, con la voluntad máxima de dar una transparencia y una normalidad a las cosas", recalcó el imputado acerca del nombramiento de la Infanta en la entidad a través de la cual presuntamente fueron desviados unos 5,8 millones de euros.
   En su primera pregunta en torno al papel de la hija del Rey Don Juan Carlos, el titular del Juzgado de Instrucción nº 3 de Palma, José Castro, observó que según los estatutos de Nóos, con tres miembros en la Junta -presidente, tesorero y secretario- "bastaba", a lo que el Duque respondió que sus asesores le dijeron que "había esto, conformamos que iban a ser cinco y yo siempre he pensado que el formalismo eran cinco, no tres".
   Al interpelarle sobre qué hacía entonces su esposa como vocal, Urdangarin se limitó a contestar: "absolutamente nada", tras lo cual el juez le preguntó "y si no hacía nada, ¿para qué estaba allí?".
 "Le repito Señoría, yo siempre he pensado que hacían falta cinco personas para formalizar esa Junta y nombramos a las personas de máxima confianza y máxima transparencia para ello. Nada más. Es la primera noticia que tengo que con tres ya hubiésemos conformado la Junta", espetó el encausado.
   Una respuesta que llevó al juez a preguntarle si redactó él el Estatuto de la entidad, respecto a lo cual el Duque aseveró que "yo no lo hice, personalmente". Sin embargo, respuestas sucesivas en el mismo sentido no acabaron de convencer al magistrado, quien recalcó tajante que "el problema no es que haya uno o dos más, es que esos dos más hagan algo que justifique su presencia. Entonces, la pregunta es: ¿qué funciones tenía Doña Cristina de Borbón en esa Junta Directiva?".
   "Ninguna", insistió el expresidente de Nóos, afirmando que la presencia de su mujer en el Instituto respondía a una "voluntad máxima de dar una transparencia y una normalidad a las cosas". De nuevo, el juez intervino para precisar que para dar "transparencia no es obligatorio que esté Doña Cristina, digo yo. Para crear un área de influencias, sí que es obligado que esté Doña Cristina, pero para que haya transparencia...".
   Consideración que llevó al Duque a terciar: "Transparencia, comodidad, vaya, formalismo, personas que estén cerca nuestro y que saben que esa idea, pues la podemos cerrar con ellos, nada más. Esa vacante la podemos cerrar con ellos. No se me ocurrió otra lectura, Señoría, a ese tema", justificó.
   Acto seguido, Castro le preguntó si "no es más cierto" que el hecho de que figurara en la Junta tanto su esposa como el secretario personal de las Infantas, Carlos García Revenga, era "para ganarse un plus de solvencia, de credibilidad para obtener contrataciones públicas y privadas. A mí privadas me da igual, pero las públicas no. ¿No es eso cierto señor?". 
"Nunca se pensó en ese criterio, nunca", remachó Urdangarin.

Zarzuela trabaja, sin prisa pero sin pausa, en la abdicación

MADRID.- En La Zarzuela se trabaja desde hace semanas, sin prisa pero sin pausa, en el supuesto táctico de la abdicación, según fuentes conocedoras de la situación, que matizan que el Rey aprovechará su convalecencia para ir cerrando los apoyos estratégicos al Príncipe, tanto del mundo político como económico, y de potencias extranjeras interesadas en nuestra estabilidad. Una vez completado ese proceso, se abordaría el planteamiento legislativo previsto en la Constitución para hacerla efectiva, según las mismas fuentes.

Diversas instancias han trasmitido ya a La Zarzuela la conveniencia de la abdicación en cuanto las circunstancias del país lo permitan al objeto de conjurar una posible inestabilidad institucional, que agravaría, aún más, la crisis por la que atraviesa España en varios órdenes. Sin embargo, el propio monarca parece entender que la fruta de la sucesión hereditaria no estaría madura sin asegurar y consolidar primero determinados apoyos previos, incluso de los que hoy goza el propio Juan Carlos I. Ahí estarían las claves del silencio, del retraso y de los desmentidos para evitar dar sensación de una interinidad nada buena para España.

El Príncipe Felipe, con 45 años y un largo recorrido como auxiliar de la Jefatura del Estado, se encuentra teóricamente en el momento ideal para acceder a la sucesión de su padre, con recurrentes problemas de salud que merman sus capacidades funcionales precisamente en unos momentos en que se necesita la imagen de un vértice en pleno vigor y de un liderazgo que asegure la salida inmediata de un sistema político absolutamente inválido para las nuevas exigencias y necesidades de la sociedad española.

Ese esfuerzo, que parece titánico, corresponde más a un hombre de la edad del Príncipe que a un monarca septuagenario con su ciclo cerrado más que de sobra pero que, conocedor en profundidad del código genético de su reino, trata de asegurar a su manera el comienzo del reinado de su hijo con él todavía en vida para poder ejercer su autoridad residual llegado el caso.

Ninguna otra razón de fondo, con excepción de la coyuntura político-económica del país y la ruptura del pacto tácito de la Corona con los nacionalistas catalanes, estaría condicionando los tiempos de una abdicación para la que se buscará -y encontrará- el momento más adecuado o menos inoportuno en los próximos meses y, si hiciera falta, hasta semanas si la evolución de los acontecimientos así lo aconsejara, siempre según las mismas fuentes.

Retirarse a tiempo, dicen / Fernando Jáuregui

La proliferación de noticias incide negativamente en la profundidad del análisis de lo mucho que está ocurriendo. Quien busque símbolos de la nueva era no tiene sino que acudir a las imágenes de la inusual retirada de un Papa. O la noticia -no quiero, desde luego, establecer otros paralelismos que el mero simbolismo temporal-de la muerte del 'nonagenario que movilizó a la juventud' -así tituló algún periódico francés la noticia-Stephane Hessel, el padre del movimiento, que ya no sé en dónde para, de 'los indignados'. "Retirarse a tiempo", dicen algunas cartas al director, destacadas en algún importante diario español, aunque sin citar más nombres que el de Benedicto XVI. Pero cualquiera que quiera comprender, comprenderá: hay que hacer planteamientos de futuro, y recuerdo que, en tiempos de Franco, un rotativo luego dinamitado, el 'Madrid', recibió una severa sanción por haber publicado un artículo de Rafael Calvo Serer precisamente con este título, 'retirarse a tiempo', en el que solamente se aludía al ejemplo histórico de De Gaulle. Pero, sin duda, quien debía entender el mensaje, allá en las cuevas censoras de El Pardo, lo entendió, y vinieron la sanción y más tarde la dinamita.

Los tiempos que corren, afortunadamente, no son los mismos, y hoy, cuando el Rey se somete a una nueva y delicada operación quirúrgica, muchos medios especulan con mayor o menor acierto sobre una hipotética abdicación, quizá no tan a corto plazo, de Don Juan Carlos de Borbón, sobre quien pesan estos días de pasión no pocas aflicciones. Me cuento entre quienes piensan, más gracias a deducciones que a datos concretos, que el Monarca acabará abdicando, o propiciando algún tipo de retirada paulatina. Ha llegado un tiempo en el que habrá que regir los destinos de las naciones, de esta nación en concreto, de forma diferente, un tiempo en los que conseguidores como el ex socio de Urdangarín, Diego Torres, la serenísima alteza que se proclama 'amiga entrañable' del Rey o el liante ex tesorero del PP, Luis Bárcenas, no puedan ser capaces, con sus solos manejos y chantajes, de hacer temblar a un Estado fuerte de un país grande como España.

Pero, claro, estos terremotos no se producen en el vacío. Las cosas no están, definitivamente, bien. Pero las crisis abren, como decía Einstein, épocas de oportunidades. Los españoles hemos tenido que adaptarnos a ser un cuarenta por ciento más pobres que hace apenas tres años, pero aprendemos, por la vía emprendedora, a sortear las dificultades mayores. Nos enfrentamos a una corrupción rampante en el pasado inmediato, pero creo que estamos, mal que bien, sabiendo hacerle frente para que no se repitan en el presente cosas tan horribles como las andanzas de Bárcenas, los espionajes de Método 3 o los abusos de Urdangarín, o de Blanco, o de...  Ahora, hace falta esa gran operación política que nos permita volver a encontrarnos con nosotros mismos, recuperar confianzas perdidas y modernizar estructuras, comenzando por la Constitución.

Me dicen que hay conversaciones subterráneas para dar un acelerón a tantas cosas decrépitas, a tanta ley desfasada, a antas inercias inmovilistas. Ojalá sirvan de algo, porque lo que es ahora me da la impresión de que las gentes que sí pagan sus impuestos -que son la mayoría, señor Montoro-y sí cumplen con sus deberes cívicos empiezan a pensar que la regeneración consiste en una especie de abdicación general de quienes están al timón de esta nave, y creo que esto que digo no se refiere precisamente a la figura de Don Juan Carlos de Borbón, el pese a todo buen Rey cuya recuperación inmediata yo deseo fervientemente. Por lo demás, imitaré al inolvidable Calvo Serer, o a quienes escriben estos días en algunos periódicos cartas algo crípticas al director: hablaré de 'retirarse a tiempo' sin citar algunos nombres que nos puedan venir a la cabeza. Entre otras cosas, porque creo que sería mucho más importante una evolución rápida de las ideas enrocadas en las cabezas de algunos mandatarios  que un relevo de caras, sin más. Especialmente cuando no hay garantías sobre quiénes serían los sustitutos, que ya se sabe que todo es susceptible de empeoramiento.

Hasta finales de 2014 no habrá juicio por el 'caso Nóos'

MADRID.- Parece que no son buenos tiempos para Zarzuela. Si la convalecencia del Rey don Juan Carlos será finalmente más larga de lo esperada, de entre dos y sis meses, ahora se conoce un dato administrativo bastante negativo para sus intereses mediáticos: puede que hasta finales de 2014 no comience a juzgarse el llamado 'caso Nóos', en el que se investigan los negocios de Iñaki Urdangarín con su ex socio Diego Torres y el papel del secretario de las infantas, García Revenga.

Esto lo afirma el diario 'La Razón': el comienzo del juicio del caso Nóos no está previsto que se celebre antes del otoño de 2014, ya que, aunque la investigación está llegando a su fin, el colapso que sufre la Audiencia Provincial de Palma hace difícil que se produzca antes.

Además, según informa 'Abc', hay más malas noticias para la Familia Real por culpa del duque de Palma. La reforma de la casa de Pedralbes de Urdangarin y la infanta Cristina costó 2.976.056 euros que se suman a los 5,8 millones que los duques de Palma abonaron por el inmueble.

Un informe de la Agencia Tributaria remitido al juez del caso Nóos, José Castro, dentro de la investigación a la que Hacienda está sometiendo a Urdangarin, revela el coste que el imputado y su esposa afrontaron para la reforma de su casa en el barrio residencial de Barcelona, construida sobre una parcela de 2.140 metros cuadrados. 

La documentación de Hacienda desvela que las obras se prolongaron durante seis años y los mayores desembolsos se produjeron en 2005 y 2006, coincidiendo con los años de mayor actividad económica del Instituto Nóos.

Pere Navarro defiende que España ganaría "energía e imagen" con la abdicación del Rey

BARCELONA.- El primer secretario del PSC, Pere Navarro, defiende que España ganaría "energía y otra imagen" con la abdicación del Rey de cara a acometer las reformas necesarias para fortalecer la democracia y avanzar hacia un Estado federal.

   En sendas entrevistas este lunes a Catalunya Radio y Antena 3, ha sostenido que "hace falta mucha energía y mucha fuerza" para acometer las reformas necesarias en España, y que quien la puede representar mejor como jefe del Estado es el Príncipe.
   El dirigente socialista, que ha deseado una pronta recuperación al monarca tras su última operación, ha remarcado que el relevo al frente de la Monarquía es un aspecto más de los cambios que requiere el Estado.
   Navarro, que ha reconocido haber recibido mucho más apoyo de la calle que de sus compañeros del PSOE, ha argumentado que España está "en una situación muy grave que requiere todas las energías".
   Preguntado sobre por qué un republicano defiende la continuidad de la Monarquía, ha defendido la continuidad de la Corona porque no es momento de abrir otra división entre monárquicos y republicanos.