miércoles, 24 de octubre de 2012

El Rey de España arranca mañana en Bombay una visita oficial de dos días a India

BOMBAY.- El Rey de España ha llegado hoy a Bombay, donde arranca mañana jueves su visita oficial de dos días a India centrada en favorecer la adjudicación de contratos a empresas españolas en el sector de las infraestructuras principalmente, aunque esta potencia emergente presenta también oportunidades en las áreas de las energías renovables, la Defensa y la industria cinematográfica.

   Don Juan Carlos ha viajado a India acompañado por cuatro ministros (Exteriores, Fomento, Industria y Defensa) y una docena de directivos de empresas de las constructoras Isolux Corsán, OHL, Sacyr y Ferrovial; los fabricantes de sistemas ferroviarios CAF y Talgo; las tecnológicas Indra y Abengoa; los desarrolladores de energías renovables Gestamp y Elecnor; la naval Navantia y el fabricante de sanitarios, Roca.
   El jefe del Estado, con el resto de la delegación, se aloja en el hotel Taj Mahal, uno de los objetivos de los atentados de noviembre de 2008 en los que murieron 173 personas.
   Su agenda comenzará mañana con una recepción a la colectividad española, que irá seguida de un almuerzo con presencia de empresarios españoles e indios, donde el jefe del Estado pronunciará un discurso.
   Por la tarde, el monarca preveía reunirse con el equipo artístico de la película india 'Solo se vive una vez', rodada parcialmente en España y que en India tuvo más éxito que la última entrega de Harry Potter.
   De hecho, el viaje del Rey se quiere aprovechar para que ambos países firmen un acuerdo de cooperación que abrirá la puerta a futuras coproducciones cinematográficas entre España e India, visto el éxito cosechado por este film rodado en España y que narra las peripecias de tres amigos en un viaje por nuestro país, con participación en la Fiesta de la Tomatina incluida.
   Don Juan Carlos se desplazará esa misma tarde a Nueva Delhi, aunque antes mantendrá en Bombay un encuentro con el gobernador del Estado de Maharastra, Raj Bhavan.
   Ya el viernes en Nueva Delhi, el monarca se entrevistará con el presidente y primer ministro indios, Pranab Mukherjee y Manmohan Singh, respectivamente.
   Tanto el Rey como las empresas españolas que le acompañan aprovecharán su presencia en India para intentar convencer a los licitadores indios de que los proyectos españoles son la opción más ventajosa frente a otros competidores, si bien no está previsto que se firme ningún contrato durante la visita.
   Las obras de ampliación de los metros de Nueva Delhi, Bombay y Calcuta; la construcción de una carretera de 22 kilómetros sobre el mar en la zona de Bombay; el AVE entre Nueva Delhi y Ahmedabab, y el futuro desarrollo de las energías solar y nuclear en el país, son algunos de los proyectos que han despertado el interés de las compañías españolas.
   Aunque India ha registrado una desaceleración económica en los últimos años, sigue creciendo al 5,6 por ciento anual y necesita inversiones extranjeras en sectores como las infraestructuras, la energía o el tratamiento de aguas y residuos para superar aquellas carencias que hoy por hoy obstaculizan su mayor desarrollo.
   En los próximos 20 años, según estimaciones de expertos, India acaparará la cuarta parte del negocio mundial en materia de infraestructuras.
   Al margen del acuerdo de coproducción cinematográfica, el viaje del Rey se aprovechará para firmar otros cuatro acuerdos de colaboración, entre ellos una actualización del convenio bilateral para evitar la doble imposición y la evasión fiscal y el primer acuerdo marco en materia de Defensa (indispensable para futuras ventas).
   Renfe y Adif suscribirán un convenio con Indian Railways para el intercambio de tecnología.
   Este será el tercer viaje de marcado acento económico que el Rey emprenda este año, tras los desplazamiento realizados a Brasil y Chile, en junio, y Rusia en julio, destinos a los que viajó también acompañado por una delegación de empresarios.
   El Palacio de la Zarzuela ha avanzado que el jefe del Estado llevará a cabo otra serie de viajes de este tipo a lo largo de 2013, ya que este modelo de desplazamientos, centrados en favorecer oportunidades de negocio para nuestras empresas, se está revelando "muy eficaz", según fuentes de la Casa del Rey.

La monarquía española escribe su último capítulo / Javier del Rey Morató *

Decía Raymond Aron que los contemporáneos son ciegos y no comprenden los acontecimientos que viven.

Es cierto. En 1914, nadie sospechó el horror que les esperaba. Los españoles de 1929 no maliciaron que una de las secuelas de la crisis sería la caída de la monarquía en 1931. El 18 de julio de 1936, las parejas que se besaban en los jardines del Parque del Buen Retiro no sabían que aquél era su último beso: no habría boda, ni hijos, ni futuro en común. 

En 1938, Neville Charmbelain, primer ministro del Reino Unido, regresó a Londres –después de su encuentro con Hitler en Munich–, pronunció el discurso titulado “La paz de este siglo”, y no sospechó que Europa sería un enorme cementerio: más de cincuenta millones de cadáveres. 

Los españoles de 2012 no saben que la historia ha decidido bajar a la calle, y que probablemente les depara sorpresas muy desagradables: la monarquía hace aguas. 
Si el Rey es símbolo de la unidad y permanencia del Estado –como reza el artículo 56 de la Constitución–, o es capaz de mantener esa unidad, o es un florero. 

La deriva independentista de Cataluña nos dice que se acabó la farsa: quieren su Estado propio, y van a por él. Pero es evidente que esa conquista no será inmediata.

The Economist se pregunta si Cataluña será el próximo Estado de la Unión Europea. Y en Le Monde , se puede leer “L’Espagne ne nous respecte pas”, “Madrid nous vole”, “España no nos respeta”, “Madrid nos roba”. 

Ahí está el éxito de los nacionalistas catalanes: la independencia ya está en la agenda mediática , en España y en la Unión Europea. La entrevista entre Artur Mas y el presidente Rajoy, el jueves 20 de septiembre, dejó las cosas claras: no hay margen para el pacto fiscal. Esa decisión -que conocían los nacionalistas-, les viene como anillo al dedo para el nuevo escenario: legitimar la escisión y negociarla. 

La crisis podrá hacer caer la monarquía. Y poner punto final a un Estado cuya historia tiene quinientos veinte años.

(*) Profesor de Comunicación Política en la Universidad Complutense

Las infantas Elena y Cristina apartadas del resto de la Familia Real en el Museo de Cera


Las infantas Elena y Cristina han sido relegadas a un segundo plano hasta en el Museo de Cera, de Madrid. Los constantes problemas en torno a la Familia Real que se han sucedido en los últimos años y en los que las protagonistas han sido las hermanas mayores del Príncipe Felipe, han hecho que la Casa Real decida dejarlas a un lado de sus actividades. Esto ha derivado en que las figuras que las representan en el Museo de Cera ya no estén a la misma altura que los Reyes y los Príncipes, sino en un segundo plano, como meras espectadoras de la Monarquía y no como parte de ella, según la revista 'Ella Hoy'.

El error de don Felipe por falta de costumbre

MADRID.- Ser el heredero de la Corona puede traer algunas incómodas situaciones y si no que se lo digan al Príncipe Felipe que se enfrentó a uno de estos embarazosos momentos el pasado martes.

   Don Felipe acudió al funeral en memoria de Iñigo de Arteaga que se celebró en la madrileña iglesia de San Francisco de Borja. Cuando el príncipe abandonó el templo por una de las puertas laterales se cruzó con una mujer que pedía limosna y que le tendió la mano para que le diera una moneda.
   El heredero más acostumbrado a que la gente le pida saludos y no dinero, no lo dudó un segundo. Alargó su brazo, tendió su mano y le dio un fuerte apretón.
   La mujer de origen rumano no daba crédito a la reacción real aunque correspondió al saludo de Don Felipe, que muy satisfecho continuó su camino ajeno a la petición.
   Está claro que el Príncipe de Asturias dió así un nuevo significado al concepto de 'limosna'.

Iñaki Urdangarin se ofreció a Jorge Valdano para encargarse de los fichajes del Real Madrid

MADRID.- Urdangarin vio en el Madrid de los Galácticos (Zidane, Figo, Ronaldo) una fuente muy jugosa de ingresos. Es una de las muchas líneas de negocio que trató de abrir Iñaki Urdangarin desde su emporio de Nóos. Valdano no aceptó y aún a día de hoy en el club comentaron la "osadía" del marido de la infanta Cristina.

El libro que Eduardo Inda y Esteban Urreiztieta acaban de publicar, 'Urdangarin, un conseguidor en la corte del Rey Juan Carlos', es una bomba de relojería en el que se cuentan las tretas del yerno del Rey para hacerse con grandes cantidades de dinero.

Una de ellas fue tratar de hacerse el responsable de fichajes del Real Madrid. Visto que sus negocios en Baleares iban viento en popa, y que el mundo del deporte les estaba ofreciendo pingües ingresos, Urdangarin solicitó, en la primavera de 2004, una entrevista con Jorge Valdano. Cuentan Indan y Urreiztieta en su libro que "el campeón del mundo de fútbol tuvo que echar mano de sus más profundas dotes de gentleman para no mandar a esparragar a Iñaki Urdangarin cuando le visitó en las oficianes del Santiago Bernabéu.

Así, Iñaki le propuso "un tema que se nos ha ocurrido a mi socio, Diego Torres, y a mí. Queríamos proponerte encargarnos de los fichajes del Real Madrid". Y se lo dijo a un hombre "que no salía de su asombro, que alucinaba, que estaba literalmente estupefacto". La osadía de Urdangarin y Torres aún se comenta como chascarrillo en el club, según el libro, que recuerda los inconvenientes que veía Valdano para el 'fichaje' de los cerebros de Nóos, entre otros, que no eran agentes FIFA.

Javier Bardem más monárquico con Camila que con doña Sofía

LONDRES.- Poco amigo de las corbatas y etiquetas, Javier Bardem sorprendió ayer en la premiere mundial de ‘007 Skyfall’ celebrada en Londres vistiendo un impecable esmoquin, etiqueta que también lucieron el resto de actores de la nueva entrega del agente secreto en la que el actor español da vida al villano de la nueva saga. No se sabe si se trata de un cambio de estilo del ganador de un Oscar por ‘No es país para viejos’, pero llama la atención que pueda ser para cumplir con el protocolo de un acto al que asistía el Príncipe Carlos y Camila como representantes de la Familia Real inglesa.

Si echamos la vista atrás, este pequeño detalle es aún más llamativo puesto que en su momento fue muy comentado ni siquiera llevara corbata cuando recibió la medalla de Oro del Spanish Institute, en Nueva York, hace ahora un año a pesar de que al acto estuviera presidido por la reina Doña Sofía. Este gesto fue interpretado como un pequeño desaire del actor español más internacional a la Familia Real española, aunque aquel día, en plena sede del 'Spanish' ya aprovechara para presumir de su convencido republicanismo.

Agradezco a la reina de España este reconocimiento más allá de mi conocida opinión sobre la monarquía”, dijo en su discurso delante de doña Sofía y personalidades tan variadas como el expresidente Bill Clinton.

Ahora sorprende este cambio de estilismo y de etiqueta del actor. Por este motivo y porque hasta ahora ni con la Familia Real lo había cumplido, muchos se preguntan si el esmoquin es, en realidad, una imposición de la productora.

El príncipe barbudo / José Apezarena *

Un día se la quita, otro se la deja. Va por temporadas. Me refiero al heredero, al príncipe Felipe, y su poblada barba.
 
Últimamente la luce, como ocurrió en la fiesta nacional, el 12 de octubre, en el desfile de la plaza de Neptuno y en la recepción del Palacio Real. Así se le ha visto también este fin de semana en Luxemburgo, en la boda del heredero ducal.

Ya sé que es un asunto muy personal, pero no acabo de entender esos cambios, que pueden desconcertar a la gente si se repiten con demasiada frecuencia. En una sociedad de imagen, como la que vivimos, tales cuestiones tienen alguna relevancia.

Soy de la opinión de que esa barba, ya bastante cana por cierto, no favorece demasiado al príncipe. Entre otras cosas, porque le hace demasiado mayor. Don Felipe tiene 44 años, camino de 45, pero con ese adorno facial pareciera tener unos cuantos más.

¿Por qué su afición a lucir barba? He de suponer que porque le gusta, claro. Pero también porque igualmente está de acuerdo la princesa Letizia, de la que se cuenta que tiene mucha mano en los que atañe a cuestiones de imagen de los herederos.

Pero, si lo que se persigue es trasladar a los ciudadanos una especie de señal, en la línea de que el príncipe es persona madura, y en condiciones por tanto de asumir con garantías la Jefatura del Estado, el empeño se me antoja superfluo. Porque el príncipe ha acreditado ya de sobra esa y otras cualidades.

Es más. Si tal fuera la finalidad del recurso a la barba, constituiría incluso un rasgo negativo, como de desconfianza del príncipe en sí mismo, en lo que ahora es y representa.

El general MacArthur era un personaje muy celoso de su imagen pública. Recibía abundantes cartas de ciudadanos admiradores suyos, las leía todas y tomaba buena nota. El general solía llevar consigo un grueso bastón (casi parecía un garrote), y en una de las misivas le plantearon si era porque lo necesitaba para sentirse más seguro. Apenas leer esas líneas, MacArthur arrojó el bastón (casi parecía un garrote) en una papelera y dejó de utilizarlo.

(*) Periodista en la Corte